"Yo si no lo veo, no lo creo."
Frase muy típica, entre nosotros los ateos.
Y la cuestión es
que necesito alguna prueba de esa perfecta religión.
necesito meter mis manos en las entrañas de vuestro señor
y comprobar que todo lo que decía era cierto.
Después de tanto,
habrá cosas que habrán ido cambiando con el paso del tiempo, ¿no?
Yo necesito una prueba de que mi fe es la verdadera
y no una burda ilusión.
Y es que, lo que sucede es,
que me cuesta creer en eso que llaman amor.
Lo que cada uno tiene que creer es en la fuerza de voluntad de cada uno.
ResponderEliminarA fin de cuentas, será uno mismo quien solucione las cosas de la vida.
Hay que saber abrir y/o cerrar los ojos cuando es necesario, y eso es muy muy difícil. Cuando uno menos lo espera puede estar soñando, y tanto el sueño como los sueños son incontrolables...
ResponderEliminarVaya, interesante reflexión. Lo tendré en cuenta!
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